-->

Las Venas Abiertas De America Latina

На нашем литературном портале можно бесплатно читать книгу Las Venas Abiertas De America Latina, Galeano Eduardo-- . Жанр: Современная проза. Онлайн библиотека дает возможность прочитать весь текст и даже без регистрации и СМС подтверждения на нашем литературном портале bazaknig.info.
Las Venas Abiertas De America Latina
Название: Las Venas Abiertas De America Latina
Автор: Galeano Eduardo
Дата добавления: 16 январь 2020
Количество просмотров: 175
Читать онлайн

Las Venas Abiertas De America Latina читать книгу онлайн

Las Venas Abiertas De America Latina - читать бесплатно онлайн , автор Galeano Eduardo

20.04.2009 Книга, подаренная лидером Венесуэлы Уго Чавесом президенту США Бараку Обаме, стала бестселлером, сообщает AFP. Чавес преподнес Обаме книгу уругвайского писателя Эдуардо Галеано "Вскрытые вены Латинской Америки" (Las Venas Abiertas de America Latina) 18 апреля на саммите стран Америки, проходившем в Тринидаде и Тобаго. Уже 19 апреля, книга Галеано, переведенная на английский язык, поднялась в списке лидеров продаж интернет-магазина Amazon.com с 734-го на 2-е место. "Открытые вены Латинской Америки" на языке оригинала продемонстрировали еще более впечатляющий рост популярности, переместившись в течение суток с 47468-го месте на 283-е. Книга известного публициста Эдуардо Галеано, рассказывающая об истории разграбления Латинской Америки от конкистадоров до глобальных корпораций, впервые вышла в свет в 1971 году. На русском языке произведение Галеано было опубликовано в 1986 году. На книге Галеано, преподнесенной Чавесом Обаме, президент Венесуэлы оставил дарственную надпись: "Обаме, с любовью" (For Obama, with affection). Президент США назвал подарок Чавеса "приятным жестом". На саммите стран Америки Чавес также пообещал восстановить дипломатические отношения между Венесуэлой и США, прерванные в сентябре 2008 года по инициативе Каракаса. На пост посла Венесуэлы в США Чавес предложил кандидатуру Роя Чэйдертона – представителя Венесуэлы в Организации американских государств. Госсекретарь США Хиллари Клинтон поддержала идею восстановления двусторонних дипломатических отношений, однако пока не сообщила, кто займет пост посла США в Венесуэле.

***

Escrita en 1970, y revisada en 1978, `Las Venas…` no ha perdido la m?s m?nima actualidad. Se trata de un libro de Historia Contempor?nea, en el que se relata el devenir del subcontinente latinoamericano, desde su conquista por los europeos, hasta la actualidad. Y no es una historia f?ctica, es decir, de hechos y batallitas. Todo lo contrario, es la historia del expolio, la injusticia y la destrucci?n y sometimiento que este continente ha sufrido desde el siglo XVI hasta el XX a manos de los `civilizadores` occidentales.

La atenci?n principal se dedica a los hechos econ?micos, y se estudia desde el comercio del oro y el az?car de los primeros tiempos de la conquista, hasta las modernas formas de despojo de las materias primas como caf?, petr?leo, cacao, etc. Ello haciendo un brillante estudio de c?mo actualmente las econom?as de los pa?ses emancipados pertenecen del todo (y no ha podido ser de otra manera) a sus antiguos colonizadores. Por supuesto se estudian concienzudamente las causas y el desarrollo hist?rico de estos hechos (el libro cuenta con un amplio ?ndice anal?tico).

Y si a todo ello sumamos que est? escrito con un estilo made in Galeano, r?pido, directo, agudo, sin artificios, lleno de ejemplos ilustrativos, podremos concluir que estamos ante una obra maestra, que se lee con vivo inter?s y sin caer en el menor sopor o aburrimiento.

Внимание! Книга может содержать контент только для совершеннолетних. Для несовершеннолетних чтение данного контента СТРОГО ЗАПРЕЩЕНО! Если в книге присутствует наличие пропаганды ЛГБТ и другого, запрещенного контента - просьба написать на почту [email protected] для удаления материала

1 ... 39 40 41 42 43 44 45 46 47 ... 86 ВПЕРЕД
Перейти на страницу:

La oligarquía de Lima, soberbia y presuntuosa como ninguna, continuaba enriqueciéndose a manos llenas y acumulando símbolos de su poder en los palacios y los mausoleos de mármol de Carrara que la capital erguía en medio de los desiertos de arena. Antiguamente a costa de la plata de Potosí, y ahora pasaban a vivir de la mierda de los pájaros y del grumo blanco y brillante de las salitreras. Perú creía que era independiente, pero Inglaterra había ocupado el lugar de España. «El país se sintió rico-escribía Mariátegui-. El Estado usó sin medida de su crédito. Vivió en el derroche, hipotecando su porvenir a las finanzas inglesas». En 1868, según Romero, los gastos y las deudas del Estado ya eran mucho mayores que el valor de las ventas al exterior. Los depósitos de guano servían de garantía a los empréstitos británicos, y Europa jugaba con los precios; la rapiña de los exportadores hacía estragos: lo que la naturaleza había acumulado en las islas a lo largo de milenios se maltrataba en pocos años. Mientras tanto, en las pampas salitreras, cuenta Bermúdez, los obreros sobrevivían en chozas «miserables, apenas más altas que el hombre, hechas con piedras, cascotes de caliche y barro, de un solo recinto».

La explotación del salitre rápidamente se entendió hasta la provincia boliviana de Antofagasta, aunque el negocio no era boliviano sino peruano y, más que peruano, chileno. Cuando el gobierno de Bolivia pretendió aplicar un impuesto a las salitreras que operaban en su suelo, los batallones del ejército de Chile invadieron la provincia para no abandonarla jamás.

Hasta aquella época, el desierto había oficiado de zona de amortiguación para los conflictos latentes entre Chile, Perú y Bolivia. El salitre desencadenó la pelea. La guerra del pacífico estalló en 1879 y duró hasta 1883. las fuerzas armadas chilenas, que ya en 1879 habían ocupado también los puertos peruanos de la región del salitre, Patillos, Iquique, Pisagua, Junín, entraron por fin victoriosas en Lima, y al día siguiente la fortaleza del Callao se rindió.

La derrota provocó la mutilación y la sangría de Perú. La economía nacional perdió sus dos principales recursos, se paralizaron las fuerzas productivas, cayó la moneda, se cerró el crédito exterior [37]. El colapso no trajo consigo, advertiría Mariátegui, una liquidación del pasado: la estructura de la economía colonial permaneció invicta, aunque faltaban sus fuentes de sustentación. Bolivia, por su parte, no se dio cuenta de lo que había perdido con la guerra: la mina de cobre más importante del mundo actual, Chuquicamata, se encuentra precisamente en la provincia, ahora chilena, de Antofagasta. Pero, ¿y los triunfadores?

El salitre y el yodo sumaban el cinco por ciento de las rentas del Estado chileno en 1880; diez años después, más de la mitad de los ingresos fiscales provenían de la expropiación de nitrato desde los territorios conquistados. En el mismo período las inversiones inglesas en Chile se triplicaron con creces: la región del salitre de convirtió en una factoría británica. Los ingleses se apoderaron del salitre utilizando procedimientos nada costosos. El gobierno de Perú había expropiado las salitreras en 1875 y las había pagado con bonos; la guerra abatió el valor de estos documentos cinco años después, a la décima parte.

Algunos aventureros audaces, como John Thomas North y su socio Robert Harvey, aprovecharon la coyuntura. Mientras los chilenos, los peruanos y los bolivianos intercambiaban balas en el campo de batalla, los ingleses se dedicaban a quedarse con los bonos, gracias a los créditos que el banco de Valparaíso y otros bancos chilenos les proporcionaban sin dificultad alguna. Los soldados estaban peleando para ellos, aunque no lo sabían. El gobierno chileno recompensó inmediatamente el sacrificio de North, Harvey, Inglis, James, Bush, Robertson y otros laboriosos hombres de empresa: en 1881 dispuso la devolución de las salitreras a sus legítimos dueños, cuando ya la mitad de los bonos había pasado a las manos brujas de los especuladores británicos. No había salido ni un penique de Inglaterra para financiar este despojo.

Al abrirse la década del '90, Chile destinaba a Inglaterra las tres cuartas partes de sus exportaciones, y de Inglaterra recibía casi la mitad de sus importaciones; su dependencia comercial era todavía mayor que la que por entonces padecía la India. La guerra había otorgado a Chile el monopolio mundial de los nitratos naturales, pero el rey del salitre era John Thomas North.

Una de sus empresas, la Liverpool Nitrate Company, pagaba dividendos del cuarenta por ciento. Este personaje había desembarcado en el puerto de Valparaíso, en 1866, con sólo diez libras esterlinas en el bolsillo de su viejo traje lleno de polvo; treinta años después, los príncipes y los duques, los políticos más prominentes y los grandes industriales se sentaban a la mesa de su mansión en Londres. North se había afiliado, como correspondía a un caballero de sus quilates, al Partido Conservador y a la Logia Masónica de Kent. Lord Dorchester, Lord Randolph Churchill y el Marqués de Stockpole asistían a sus fiestas extravagantes, en las que North bailaba disfrazado de Enrique VIII. Mientras tanto, en su lejano reino del salitre, los obreros chilenos no conocían el descanso los domingos, trabajaban hasta dieciséis horas por día y cobraban sus salarios con fichas que perdían cerca de la mitad de su valor en las pulperías de las empresas.

Entre 1886 y 1890, bajo la presidencia de José Manuel Balmaceda, el Estado chileno realizó, dice Ramírez Necochea, «los planes de progreso más ambiciosos de toda su historia». Balmaceda impulsó el desarrollo de algunas industrias, ejecutó importantes obras públicas, renovó la educación, tomó medidas para romper el monopolio de la empresa británica de ferrocarriles en Tarapacá y contrató con Alemania el primer y único empréstito que Chile no recibió de Inglaterra en todo el siglo pasado. En 1888 anunció que era necesario nacionalizar los distritos salitreros mediante la formación de empresas chilenas, y se negó a vender a los ingleses las tierras salitreras de propiedad del estado. Tres años más tarde estalló la guerra civil.

North y sus colegas financiaron con holgura a los rebeldes [38] y los barcos británicos de guerra bloquearon la costa de Chile, mientras en Londres la prensa bramaba contra Balmaceda, «dictador de la peor especie», «carnicero». Derrotado, Balmaceda se suicidó. El embajador inglés informó al Foreing Office: «La comunidad británica no hace secretos de su satisfacción por la caída de Balmaceda, cuyo triunfo, se cree, habría implicado serios perjuicios a los intereses comerciales británicos». De inmediato se vinieron abajo las inversiones estatales en caminos, ferrocarriles, colonización, educación y obras públicas a la par que las empresas británicas extendían sus dominios.

En vísperas de la primera guerra mundial, dos tercios del ingreso nacional de Chile provenían de la exportación de los nitratos, pero la pampa salitrera era más ancha y ajena que nunca. La prosperidad no había servido para desarrollar y diversificar el país, sino que había acentuado por el contrario, sus deformaciones estructurales. Chile funcionaba como un apéndice de la economía británica: el más importante proveedor de abonos del mercado europeo no tenía derecho a la vida propia. Y entonces un químico alemán derrotó, desde su laboratorio, a los generales que habían triunfado, años atrás, en los campos de batalla. El perfeccionamiento del proceso Haber-Bosch para producir nitratos fijando el nitrógeno del aire, desplazó al salitre definitivamente y provocó la estrepitosa caída de la economía chilena. La crisis del salitre fue la crisis de Chile, honda herida, porque Chile vivía del salitre y para el salitre -y el salitre estaba en manos extranjeras.

1 ... 39 40 41 42 43 44 45 46 47 ... 86 ВПЕРЕД
Перейти на страницу:
Комментариев (0)
название