Escupir? Sobre Vuestra Tumba
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El protagonista de la historia es Lee Anderson, un j?ven negro pero con apariencia de blanco y muy atractivo. Su hermano fue asesinado por un blanco porque se enter? de que estaba saliendo con su hija, y otro de sus hermanos sufri? tambi?n palizas por parte de racistas blancos. Lee planea vengarse de toda la raza blanca por el sufrimiento que ha causado a su familia, y su `vendetta` ser? planeada al l?mite, fr?a y meticulosamente.
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– Tienes que irte ya -le dije-. Vuelve a casa. Cuídate, y el jueves por la noche haces la maleta y te largas. Yo iré el lunes. Ya he pedido la licencia.
Pareció rehacerse de golpe y sonrió, incrédula.
– Lee…, ¿es verdad?
– Pues claro.
– Lee, te adoro… Sabes, vamos a ser tan felices…
Realmente era poco rencorosa. Las chicas no acostumbran a ser tan conciliadoras. La puse en pie y le acaricié los pechos a través del vestido. Se puso tensa y se echó hacia atrás. Quería que siguiera. Yo habría preferido ventilar la habitación, pero ella se aferró a mí y, con una mano, me desabrochó el pantalón. Le levanté el vestido y me la tiré encima de la larga mesa en la que los clientes dejaban los libros que habían estado hojeando; ella tenía los ojos cerrados y parecía muerta. Cuando sentí que se relajaba, seguí hasta que se puso a gemir, y me corrí en su vestido, y entonces se levantó y, llevándose una mano a la boca, vomitó de nuevo.
Luego yo la puse en pie, le abroché el abrigo, la arrastré hasta su coche pasando por la puerta trasera y la instalé al volante. Tenía todo el aspecto dc estar en babia, pero reunió sus últimas fuerzas para morderme el labio inferior hasta hacerme sangrar; yo no me inmuté y contemplé cómo se marchaba. Pienso que el coche, afortunadamente para ella, se sabía el camino.
Luego me fui a casa y me di un baño, para quitarme aquel olor.