La casa de las bellas durmientes

На нашем литературном портале можно бесплатно читать книгу La casa de las bellas durmientes, Kawabata Yasunari-- . Жанр: Классическая проза. Онлайн библиотека дает возможность прочитать весь текст и даже без регистрации и СМС подтверждения на нашем литературном портале bazaknig.info.
La casa de las bellas durmientes
Название: La casa de las bellas durmientes
Автор: Kawabata Yasunari
Дата добавления: 16 январь 2020
Количество просмотров: 395
Читать онлайн

La casa de las bellas durmientes читать книгу онлайн

La casa de las bellas durmientes - читать бесплатно онлайн , автор Kawabata Yasunari

Yasunari Kawabata, Premio Nobel de Literatura 1968, explora la melancol?a, la nostalgia de los a?os perdidos, los recuerdos que no volver?n, envuelto en un fino erotismo, en los tres cuentos incluidos en este libro.

“La Casa de las Bellas Durmientes”, que da t?tulo al libro, es un burdel en Tokyo donde ancianos adinerados pueden pasar la noche junto a hermosas j?venes v?rgenes desnudas profundamente dormidas. Los clientes de este local tienen absolutamente prohibido tener relaciones sexuales con las j?venes, y no deben intentar despertarlas. A cambio puede experimentar el placer de rememorar su pasado y sus experiencias anteriores, sin temor a verse expuestos. El deseo, la impotencia ante la absoluta vulnerabilidad y fragilidad, la desolaci?n y desesperanza, la nostalgia y el coqueteo con la muerte se muestran de manera recurrente en esta historia, una desconcertante joya de la literatura, llena de delicadas sensaciones e inolvidables im?genes cuidadosamente trazadas.

En “El Brazo”, Kawabata retoma este mismo tema de una forma un tanto diferente y surrealista: la perturbadora relaci?n entre un anciano y el brazo de una joven mujer. Nuevamente, el contraste entre la pasi?n de la juventud, y la a?oranza de la vejez es evidenciado a trav?s de un brazo sin due?a, que poco a poco se fusiona con el cuerpo del anciano. Aunque menos poderoso que el primer cuento, esta segunda historia est? tambi?n llena de im?genes desconcertantes y de profunda reflexi?n. ?Hasta qu? punto podemos asimilar algo completamente ajeno y extra?o? ?Hasta que punto podemos desprendernos de lo opuesto?

“Sobre p?jaros y animales”, narra la historia de aves en cautiverio cuidadas – o mejor dicho descuidadas – por un desolado hombre a?orando amores pasados. La muerte y la soledad, figuras temibles e inevitables en cada paso de la vida.

Si tienen tiempo, denle a las bellas durmientes una oportunidad. No hay pr?ncipes azules, sino sapos descarnados y melanc?licos, pero no por eso deja de ser una lectura seductora.

Внимание! Книга может содержать контент только для совершеннолетних. Для несовершеннолетних чтение данного контента СТРОГО ЗАПРЕЩЕНО! Если в книге присутствует наличие пропаганды ЛГБТ и другого, запрещенного контента - просьба написать на почту [email protected] для удаления материала

Перейти на страницу:

Tras los ojos cerrados surgió y desapareció una interminable sucesión de fantasmas. Al cabo de un rato empezaron a adquirir cierta forma. Una serie de flechas doradas voló muy cerca y se alejó. Había en sus puntas jacintos de un profundo violeta. En los extremos había orquídeas de diversos colores. Parecía extraño que las flores no se cayeran a semejante velocidad. Eguchi abrió los ojos. Había empezado a adormecerse.

Aún no había tomado las píldoras sedantes. Dio una ojeada a su reloj, que estaba junto a ellas. Eran las doce y media. Las tomó en la mano. Pero parecía una lástima dormir esta noche, cuando no sentía nada de la melancolía y la soledad de la vejez. La muchacha respiraba pacíficamente. Cualquiera que fuese la píldora o la inyección que la había dormido, no parecía sentir ningún dolor. Quizás era una gran dosis de somnífero, quizás un veneno ligero. Eguchi pensó que le gustaría sumirse al menos una vez en un sueño tan profundo. Bajó de la cama sin hacer ruido y se dirigió a la otra habitación. Pulsó el timbre, decidido a pedir a la mujer la medicina que había sido administrada a la muchacha. El timbre sonó una y otra vez, informándole del frío, interior y exterior. Era reacio a llamar demasiadas veces, aquí en la casa secreta y en las profundidades de la noche. La región era cálida, y las hojas marchitas aún se aferraban a las ramas; pero, debido a un viento tan tenue que apenas era viento, podía oír el susurro de las hojas caídas en el jardín. Las olas rompían con suavidad contra el acantilado. El lugar era como una casa encantada en medio del silencio y la soledad. Se estremeció. Había salido con un kimono de algodón.

Cuando volvió a la habitación secreta, las mejillas de la muchacha estaban encendidas. La manta eléctrica calentaba al mínimo, pero ella era joven. Eguchi se calentó con su contacto. Tenía la espalda arqueada bajo el calor, y los pies al descubierto.

– Te enfriarás -dijo Eguchi.

Sintió la gran diferencia entre sus edades. Hubiera sido un bien poder tomar a la muchacha pequeña en su interior.

– ¿Me oyó tocar el timbre anoche? -preguntó mientras la mujer de la casa le servía el desayuno-. Quería la medicina que le dio a ella. Deseaba dormir como ella.

– Eso no está permitido. Es peligrosa para los ancianos.

– No debe preocuparse. Tengo un corazón fuerte. Y no me importaría nada irme del todo.

– Está pidiendo mucho para alguien que sólo ha estado aquí tres veces.

– ¿Qué es lo máximo que se puede obtener en esta casa?

Ella le miró fijamente, con una ligera sonrisa en los labios.

Перейти на страницу:
Комментариев (0)
название