La Biblia De Barro
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En Roma, un hombre se confiesa: Padre, me acuso de que voy a matar a un hombre. Al mismo tiempo Clara Tannenberg, una joven arqueologa nieta de un poderoso hombre de oscuro pasado, anuncia en el transcurso de un congreso el descubrimiento de unas tablillas que, de ser autenticas, serian la prueba cientifica de la existencia del patriarca Abraham: se trata de la obra de un escriba que recogio el relato del profeta sobre la creacion del mundo, la confusion de las lenguas en Babel y el Diluvio Universal. Una autentica Biblia de Barro. Junto a un equipo de arqueologos, poco antes del inicio de la ultima guerra del Golfo, Clara pondra en marcha unas arriesgadas excavaciones que alientan a muchas personas a acabar con su vida y la de su abuelo: desde millonarios traficantes de arte hasta cuatro amigos que no desistiran hasta culminar una implacable venganza. Tras el espectacular exito de La Hermandad de la Sabana Santa, Julia Navarro se consagra con esta electrizante novela en la que el lector viajara hasta los tiempos biblicos pasando por la Europa de la Segunda Guerra Mundial, Egipto, Siria, Estados Unidos, Italia, Francia, Espa?a y el Irak de los ultimos tiempos de Sadam.
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– Bien -continuó Marta-, he echado un vistazo al lugar. Es interesante lo que se ve. ¿Con cuántos obreros podremos contar?
– Alrededor de cien. Aquí en Safran contamos con unos cincuenta hombres, el resto vendrán de aldeas cercanas.
– Necesitamos más. Es imposible despejar toda esa arena si no tenemos suficientes manos. ¿Aquéllas son las casas que se están levantando para el equipo? -preguntó señalando hacia el frente.
– Sí. Están como a trescientos metros, no demasiado lejos. De manera que viviremos al lado, sin necesidad de coches para desplazarnos -respondió Clara.
– Nosotros traemos tiendas bien acondicionadas. En mi opinión, los obreros deberán terminar lo que estén haciendo para no dejarlo a medias, pero la prioridad es que se pongan a trabajar aquí ya.
El tono de Marta no dejaba lugar a dudas.
– ¿Ya? ¿Antes de que llegue el resto de la expedición? -preguntó sorprendido Fabián.
– Sí. No hay tiempo que perder. Sinceramente, no creo que podamos hacer el trabajo en tan poco tiempo, de manera que pongámonos ya. Comenzaremos mañana. Si os parece, ahora cuando regresemos a la aldea nos reunimos con los hombres para explicarles algunos detalles del trabajo que tienen que realizar. Intentaremos que la zona esté lo más despejada posible para cuando lleguen Yves y el resto del equipo. ¿Os parece bien?
– Tú mandas -respondió Fabián.
– Por mí, de acuerdo -afirmó Clara.
– Bien, os explicaré el plan de trabajo que he ido pensando que podemos empezar a hacer…